La Madre Laureta Lubowidzka (1862-1942) es una gura clave en la historia de la Congregación. La Madre Fundadora, connado plenamente en ella, le encomendó responsabilidades importantes desde joven, como ser la primera Superiora Provincial en los EE. UU. en 1889.
Tras la muerte de la Madre Fundadora, la Madre Laureta fue nombrada Superiora General en 1903 y ocupó este cargo hasta su fallecimiento en 1942. Fue bajo su liderazgo que se preservó el pensamiento y espíritu de la Fundadora. Con su apoyo, la Congregación desarrolló un modelo concreto para implementar el carisma de Nazaret, que guiaría a la comunidad en las décadas siguientes. Además, fue durante su mandato cuando la Iglesia aprobó finalmente la Congregación (1909) y las Constituciones (Alianza del Amor, 1923).
La Madre Laureta fue connada con grandes responsabilidades desde joven, marcando el rumbo de la Congregación. Bajo su liderazgo, el espíritu de la Fundadora se preservó y se consolidó. Gracias a su labor, la Congregación fue aprobada por la Iglesia y las Constituciones fueron ratificadas.