Clausura del Año Jubilar Diocesano
En las Constituciones de nuestra Congregación encontramos las siguientes palabras: “El amor a la Iglesia y al Santo Padre es un rasgo significativo de la espiritualidad que nos entregó nuestra Fundadora”. Este amor por la Iglesia se manifiesta, entre otras cosas, en la participación activa en la vida de la Iglesia local, donde nuestras comunidades cumplen diariamente su misión. En nuestro caso, es la participación en la vida de la Diócesis de Segorbe Castellón, la cual acaba de poner fin a un Año Jubilar riquísimo. En la medida de nuestro tiempo y posibilidades personales, durante ese año tan especial hemos buscado participar en la mayor cantidad de misas, peregrinaciones, simposios, conferencias y otros eventos organizados tanto en Segorbe como en Castellón.
El pasado fin de semana (15 y 16 de abril 2023), al término de las celebraciones del Año Jubilar 775, tuvieron lugar dos importantes actos en los cuales participó el Nuncio Apostólico de la Santa Sede en España, Mons. Bernardito C. Auza. El sábado participamos en la Santa Misa presidida por el Nuncio en la iglesia del Seminario Mater Dei en Castellón. Antes de la Santa Misa tuvimos la oportunidad de reunirnos personalmente con el Señor Nuncio y saludarlotambién en nombre de nuestras hermanas de Filipinas, a quienes el Señor Nuncio (quien también es de origen filipino) conoce bien. Además nos llevamos una grata sorpresa, pues resultó que el consejero del nuncio era un sacerdote de Polonia, don Roman Walczak (que conoce bien a nuestra Congregación de Polonia). ¡Que pequeño es el mundo!
Después de la Santa Misa, en el Salón de Actos hubo una reunión con el Nuncio, durante la cual nuestro invitado compartió con nosotros una reflexión sobre el camino sinodal que se vive en toda la Iglesia, con especial referencia a la situación de la Iglesia en España. También tuvimos la oportunidad de ver un documental que presenta la historia y la vida actual de nuestra diócesis.
El domingo por la tarde participamos en la solemne Eucaristía de Clausura del Año Jubilar Diocesano en la magnífica Catedral de Segorbe. Tras la Santa Misa se sirvió un refrigerio en el patio del colegio de Segorbe. Fue una excelente oportunidad para poder mantener conversaciones entre sacerdotes, los consagrados/las consagradas y laicos de distintas partes de nuestra Diócesis.
Como ha señalado en esta ocasión Mons. Casimiro López Llorente, la presencia del Nuncio Apostólico nos dio un fuerte sentido de pertenencia a la Iglesia universal y de comunión con el Santo Padre Francisco. Y también ha fortalecido nuestra creencia de que todos somos enviados como misioneros de Jesucristo para llevar la verdad y la luz del Evangelio al mundo de hoy, que parece perdido en muchos sentidos.